Se encuentra la solitaria mujer caminando en la noche, iluminada por la luna, se ha puesto tan bella como siempre. Las calles frías del invierno se hacen intransitables pero ella siempre fue fuerte, siempre se mantuvo firme sin importar las circunstancias y sin importar el día. Ella siempre trabaja cuando los demás duermen, siempre se muestra cariñosa con el cliente, siempre le atiende e intenta hacer el mejor trabajo posible. A ella no le importa el cliente, tan solo dar el dinero para dar de comer a su familia que tan mal lo está pasando.
A la llegada de las diez de la noche comienza la preparación. El marido que se encuentra con ella viendo la tele ve llegar la hora angustiado, la mira y le repite cada noche lo mismo: -No tienes porqué hacerlo cariño.- dice el hombre culpable de que su mujer no tenga otra opción para salir adelante. La mujer asiente con la cabeza siempre con esa hermosa sonrisa, se levanta y se va al cuarto. Por el camino se cruza una niña que va a dar un abrazo a su madre y le pide que le deje ayudarla, la mujer no abandona la sonrisa, hace ya tiempo que dejó de sentir lástima de sí misma. Llegan las dos de la mano al cuarto y la madre se pone a sacar la ropa mientras la hija prepara el maquillaje, cada día, con la misma emoción. La niña ignora todo lo que está ocurriendo y anima a su madre con su entusiasmo. -Sí hija, me voy a trabajar. Cada día tu mamá tiene que sentirse como una sucia muñeca porque vivimos en la miseria y no podemos hacer otra cosa- pensaba mientras terminaba de sacar la ropa. La niña ayudaba a maquillar a su madre y a vestirse. Cuando todo estaba listo se despide, da las buenas noches y deja que la puerta se cierre tras ella.
El mundo ha sido tan injusto con esta artista... De niña creyó que se dedicaría a impartir justicia, a hacer feliz a los demás, no le quedó otra que dejar que el dinero acabase con todo. La mirada perdida, la mente en blanco, paseo tras paseo hasta que alguien se acerca, maldiciendo cada error cometido en su vida para acabar así y todo para que un cerdo se acerque con su coche y la trate como un objeto con el que aliviar su deseo. Los sueños ya se desquebrajaron hace tiempo para esta dama, tan delicada y hermosa como una rosa, tan dulce y agradable como le permitió la vida. La vida tan solo la atacó por la espalda, no tuvo valentía para llamar a su puerta y decirle lo que pasaría en su cara. De la vida tan solo aprendió que tiene precio, tan solo lo tiene el polvo de una hora. Cada golpe tan solo fue la señal para darse cuenta de que la pesadilla había acabado, que todo no había acabado por desgracia.
Las balas no tienen sentido, no pueden atentar contra su vida. Su hija es la única que todavía cree a su madre invencible, lo que no sabe es que su madre ya perdió hace mucho tiempo y paga el valor de esa derrota, la paga con dolor, sudor y lágrimas. Pero todavía hay gente que cree en ella, todavía el hombre cree que existe algo dentro de ella que les puede devolver. Lo que nadie sabe es que está muerta, es solo una leyenda, una forma de mantener la calma. Vieja amada que dinero corrompió, devuélveles lo que les debes, esa explicación con la que das a conocer la verdad.
Llamémosle por su nombre bella princesa, hace tiempo que nadie te encuentra, bajo la máscara de la mentira te escondes, bajo las falsa apariencias huyes, dinos la verdad señora Libertad.
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Que personificación más impactante y estremecedora... Increíble César, me has conmovido sinceramente
ResponderEliminarMuchas gracias Bea, siempre es un placer recibir comentarios de gente como tú!
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