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Dulce trago de la locura de la vida

Aquí me encuentro, en el mismo frío lugar de siempre. El frío me golpea, intenta pararme pero no sabe que por mucho temblar que me haga no conseguirá que me rinda ante él y ante nadie.
Son las miradas de aquellos que siempre me estuvieron mirando las que me incomodan. Son ellos los que estuvieron buscando que cayese, buscaron que el tiempo les diese la razón, que su palabra pudiese cumplirse. Enhorabuena, lo conseguisteis, lleváis razón, me he equivocado, puede ser que aquellos que dijeron que llevo sobrevolando el mar durante años a punto de caer y que son las buenas acciones de algunas personas tan nobles las que no me han hecho hundirme. A ellas les debo mucho, les debo esa mentira con las que todos éstos años he conseguido creer que llegaría hacer algo importante en mi vida, gracias.
Las mentiras dulces, llenas de buenas intenciones, enmascaran la felicidad, pero yo ya estoy lo suficientemente muerto como para no creérmelas. Todas se derriban una a una, esperando siempre a mi resurgir que nunca llegó, que nunca lo hará y que pronto la idea se desvanecerá para siempre.
Tantas buenas acciones, tanta moral, tanto dolor, tanta comprensión, escucha e interés para darme cuenta de que no ha servido de nada. Todo mi vida intentando ser la mejor de las personas posibles para fracasar en lo verdaderamente importante. Tanta reflexión, tanto abandonar aquellas ideas que nada más que me hacían chocar con otras personas, tantas horas hablando con gente que no era capaz de razonar sobre temas que no tenían mayor importancia porque su mente estaba tan cerrada que no daba para más. Me río de todo mi pasado, nada más que es una losa que tendré que llevar para algún día, si alguien me quiere conocer de verdad crea que alguna vez merecí la pena. Harto, cansado de ser siempre ese fracasado, de creer que mis acciones llegarán a ser algo que nunca podrán ser y sentir que todo el camino recorrido se termina en el medio, dando un paso hacía atrás y dándome la vuelta para volver aquél en el que no molestaba a nadie, en el que pasaba desapercibido y no debía nada a nadie ni nadie a mí.
Es bonito pensar que cuando lloras alguien estará ahí para limpiarte las lágrimas, levantarte la cabeza y decirte lo muchísimo que le duele verte así y que por esa persona sonrías. La vida es tan bonita en los libros de consumo, es tan bonita en eso cuentos de niños... Enseñando a los niños caminos intransitables no es buena forma de que aprendan a vivir. El mundo es más que amor y buenas intenciones, creedme, que por muy poco que haya vivido tengo razones para pensar que el mundo es más que la falsa felicidad.
Todos contentos porque mañana será otro día, todos contentos porque la vida es un sueño en el que hay princesas y príncipes que nos hacen tan felices. La  realidad es otra, los príncipes y princesas aquí los mantienen por representar a los países, no vienen a salvarnos en caballos y vienen a darnos ese beso con el que despertar del sueño eterno.
Palabras grises, por no decir negras ya que sonaría demasiado perdidas entre tinieblas y noche. Estas palabras no son para agradar a nadie, no son para hablar de ningún tipo de realidad, solo son para que el mundo entienda que por mucho que las cosas se intenten tapar, ocultar o esconder existen y no se escapan de ellas por enterrarlas y ponerles velas.
El mundo es simple, felicidad, ahora reíros porque estáis buscando algo que muchos de vosotros si quiera sois capaces de describir. Si tanto la deseáis y tan poco podéis esperar drogaron como personas tan vacías y destruidas como los conocedores de verdad, el ignorante siempre vivió en una felicidad inmensa, sus ojos siempre estuvieron vendados con un trapo que jamás serán capaces de quitarse porque no sabe que existe. Yo también soy un ignorante, hace demasiado tiempo que ignoro la felicidad, esa que mi corazón me pide encontrar y que intenta demasiado acelerar para que la pueda encontrar.
Lo mejor de todos es la soledad, encontrada porque nadie es capaz de encontrar en mí a una persona de verdad, alguien por el que se deba luchar, demasiado imbécil para no saber despertar.
Puede que muchos no entiendan esta reacción pero solo es el reflejo de un pasado que marcó su paso por mi cuerpo, que con dolor marcó las paredes, que con inconsciencia intentaron acabar con mi vida. Se podría decir que nada de esto es cierto o que todo lo es. La libre opinión sobre algo que no puede entenderse sin haberlo vivido.
La vida es bella porque el hombre así lo quiere, si quisiese que fuese horrible por siempre así lo sería. Son los hombres los que con la esperanza todavía creen que el cielo existe y que no hay mal en este ser solo ignorancia de sus actos.
Muchos pensáis que estoy loco por publicar algo como esto pero sé que en el fondo hablo para unos pocos y no tengo miedo a recibir sus opiniones, ellos son gente a la que quiero y admiro. Son los amigos los que podrán comprender ésto, los demás tan solo se dejarán llevar por la apariencia de unas palabras que encuentran vacías y carentes de sentido para ellos y que reflejan la verdadera realidad.

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